La Radiofrecuencia Facial consiste en la aplicación de ondas electromagnéticas de alta frecuencia sobre la piel que provoca el calentamiento controlado de las diferentes capas de la dermis, con lo que vamos a conseguir...
La formación de nuevo colágeno.
El drenaje linfático de toxinas.
Aumento de la oxigenación de la piel y el tejido subcutáneo.
Aumento de lipólisis de células grasas.
La migración de fibroblastos.
En función de la intensidad que se utilice se pueden calentar diferentes capas de la dermis. Es un procedimiento indoloro y no invasivo, que se utiliza para el tratamiento de la celulitis y la flacidez de la piel en cualquier parte del cuerpo.
El efecto inmediato de la aplicación de Radiofrecuencia es lograr la reestructuración del colágeno profundo formando nuevas fibras que sustituyan a las ya envejecidas y de esa manera proporcionar una mayor elasticidad a los tejidos y obtener una piel más reafirmada.
Aunque ya en la primera sesión pueden verse resultados, hemos de tener en cuenta que los efectos de la radiofrecuencia se ven en los a partir del mes de tratamiento y mejoran en los siguientes, aunque esto dependerá del estado del colágeno de cada persona. Se necesitan entre seis y diez sesiones, pudiéndose realizar otras de recuerdo pasados unos meses.
Al terminar cada sesión de Radiofrecuencia Facial es normal que la piel presente algo de enrojecimiento debido a la hiperemia. Por lo demás, se trata de una técnica muy segura, aunque tiene sus contraindicaciones: embarazo y lactancia, pacientes con marcapasos, prótesis metálicas, implantes recientes de colágeno, infecciones y afecciones de la piel (soriasis, acné activo, rosácea)...
La Radiofrecuencia Facial puede complementarse con otras técnicas estéticas en tratamiento de manchas o arrugas, como Derma Pen, Peeling ultrasónico, Microdermoabrasión, BB Glow. etc.
Os dejamos con un video donde explicamos con más detalle el protocolo paso a paso de un tratamiento de Radiofrecuencia Facial.
Esperamos que lo disfrutéis...
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